El economista Edwin Irizarry Mora
La amenaza en el alza del servicio de energía eléctrica mantiene en alerta a distintos sectores de la población, quienes se oponen a los aumentos tarifarios, ya que atentarán contra la seguridad alimentaria de Puerto Rico.
Ante este escenario, Periódico Visión conversó con el economista Edwin Irizarry Mora quien manifestó que: “Esta situación es una consecuencia de las malas decisiones de política pública energética que se han tomado en el País”.
De acuerdo con el líder independentista, en Puerto Rico, desde el 1976 ya se había probado, en una central fotovoltaica que se construyó en Juana Díaz, que se podía tener un futuro energético basado en las fuentes de energía renovables. “Sin embargo, 47 años más tarde aún estamos en la situación de poder identificar cuál es la manera más conveniente para producir nuestra electricidad”.
“Ciertamente, esta situación nos lleva a que se siga produciendo electricidad a un costo más alto de la que puede pagar el consumidor, el comerciante y los manufactureros promedio, lo que por consiguiente provocará que cada familia en este país tendrá que dedicar más de sus ingresos para poder sufragar unos gastos que son crecientes, ya que si se llega a materializar, lo que se está anticipando, esto va significar que los puertorriqueños tendrán menos ingresos disponibles para pagar la canasta básica de bienes y servicio, incluyendo los alimentos”, sostuvo Irizarry Mora.
El profesor retirado de la Universidad de Puerto Rico (UPR) destacó que actualmente el 85 a 90 por ciento de los alimentos que se consumen en la Isla provienen del extranjero. “Actualmente, nosotros somos dependientes de los alimentos que se producen en otro país, lo que nos lleva a un problema de seguridad alimentaria que se agrava, ya que nuestros terrenos no se destinan a la producción de lo que consumimos a diario”.
Ante esta realidad, el economista manifestó sentirse preocupado de que concretarse este aumento en el servicio de Energía Eléctrica los puertorriqueños se vean obligados en tener que decidir si pagan el servicio de luz o destinan sus ingresos a la compra de alimentos. “Vamos a tener familias que podrían dejar de pagar el agua o la luz por un mes o dos meses, ya que el dinero mensual no le alcanzará para cubrir los gastos ordinarios y necesarios”.
Para finalizar, Irizarry Mora, especificó que, asimismo, el aumento podría provocar problemas de desnutrición en la familia, lo que representa una situación muy peligrosa, ya que desde hace mucho tiempo en Puerto Rico el nivel de ingresos no aumenta al mismo ritmo que el aumento que se ha experimentado en los precios.
“Es importante que establezcamos políticas públicas coordinadas que se dirijan al objetivo específico de levantar el nivel de vida de nuestra gente y de todos nuestros sectores poblacionales sin excluir a ninguno. Para que esto se logre es necesario establecer unos consensos entre el gobierno central, corporaciones públicas y municipios, la academia, las comunidades y las organizaciones sin fines de lucro para establecer medidas de política pública energética que se tienen que tomar urgentemente”, concluyó el economista.
“Si nosotros logramos encaminarnos a esa toma de decisiones consensuada entre los distintos sectores podremos comenzar a enderezar la situación socioeconómica, energética y de los recursos alimentarios del País”, puntualizó.
