Familia Sesto en conjunto de los nuevos dueños María y Kevin.
Nueve décadas ha estado instalada la tienda Sesto en el pueblo de Aguadilla, llevando alegría a través de generaciones. Ahora, es el turno de María Vann Reyes y su esposo, quienes tomaron el mando del establecimiento por un pedido de parte de la familia Sesto.
“La tienda ya estaba en liquidación y la fecha de cierre estaba planificada para el 31 de mayo de 2021, pero Kevin y yo no pudimos dejar que esto sucediera. Dios nos regaló este negocio. Fue un regalo divino y aún estamos en shock de lo que ha sucedido, sólo Él sabe los planes que tiene con nosotros. Toda la gloria es de Jesús. Agradecemos a la familia Sesto por confiar en nosotros en continuar este legado,” destacó María Vann Reyes.
María aseguró que era un regalo bien apreciado y que hará lo posible por mantenerlo. “Queremos seguir el legado, porque el trabajo que nos han dejado es enorme. Para nosotros es un honor, un regalo que no tomamos livianamente, como también siento esa responsabilidad de que el negocio sea próspero. Todo esto para honrar la memoria de esta familia que son aguadillanos muy importantes”.
La tienda Sesto fue cedida a María por los largos años de amistad y confianza. La familia decidió que era la persona indicada para que el establecimiento lograra cumplir sus 100 años (para el 2028) sirviendo a la comunidad de Aguadilla y sus turistas. Vann Reyes, destacó que la han aceptado y que está agradecida por ello.
“No he conocido a gente más humilde y bella que la gente de Aguadilla. Ellos nos han dado la bienvenida, nos han tratado como familia, el respeto y todavía me quedo maravillada. Incluso, cuando entra gente a la tienda llorando y agradeciendo que el legado de los Sesto sigue en pie. Nos cuentan hasta sus historias, hablan y recuerdan su niñez cuando compraban los uniformes escolares, entre otros recuerdos bien significativos.”
Para los que aún no conocen a la famosa tienda Sesto, está ubicada en el casco urbano de Aguadilla y se destaca por ser un souvenir shop. “La tienda está centrada en un souvenir shop manteniendo la esencia de la venta de guayaberas. Es uno de los puntos clave de las personas llegar y comprar su camisa. Tenemos de todo un poco pero ahora mismo estamos intentando promover el apoyo a nuestros artesanos locales. De verdad que me hace demasiado feliz,” sostuvo.
María logró conseguir artesanos que produzcan y enseñen a sus pares para que los productos de venta sean 100 % locales. “Conseguí un artesano que hace las chanclas de cuero originales y ahora está pasando su conocimiento a su hijo para que continúe el legado. Eso es lo que me llena de alegría y por eso los apoyamos.”
La pareja hizo una promesa tanto a los aguadillanos como a la familia Sesto de que su tienda llegaría a más de 100 años brindándole servicios a sus compueblanos.
“Para mi esposo y yo que estamos comenzando en esto queremos pasar este legado a nuestra familia y que se queden otros 100 años más y que nunca se le cambie el nombre para darle honor a la familia Sesto que tanto dio y aportó al comercio aguadillano. Le pido a Dios que al menos la familia original de Don Sesto este viva para poder celebrar los 100 años de esta gran tienda. Que puedan ver la semilla que sembraron y hasta donde ha dado fruto,” puntualizó.
Tienda Sesto en el 1928.
