Por: Víctor Rodríguez
Director de Relaciones Públicas
Administración de Seguro Social
El abuso a las personas de la tercera edad es el maltrato o daño intencional a un adulto mayor. La Ley del Seguro Social define a un adulto mayor como alguien mayor de 60 años. Este abuso toma muchas formas, incluyendo daño físico, emocional y sexual, abandono y explotación financiera. Más de 1 de cada 10 adultos mayores experimenta algún tipo de abuso cada año. Es probable que ese número sea mucho más alto porque el abuso de personas de la tercera edad con frecuencia no se denuncia, especialmente en las comunidades más necesitadas.
Las víctimas de abuso por lo general muestran señales de alarma emocionales y de comportamiento, tales como depresión, miedo o ansiedad inusuales o aislamiento intencional. Muchas víctimas son abusadas por alguien a quien conocen o en quien confían. Es importante buscar cambios inusuales en el comportamiento alrededor de:
Miembros de la familia.
Personal en centros para pacientes internados.
Cuidadores contratados o voluntarios.
Personas en puestos de confianza como médicos o asesores financieros.
También puede ayudar a hacer la diferencia poniéndose en contacto con sus seres queridos mayores. Buscar señales de advertencia de maltrato es el primer paso para prevenir el abuso. Las señales de abuso físico incluyen moretones, quemaduras u otras lesiones inexplicables.
También puede haber señales de abandono como:
Mala nutrición o higiene.
Falta de ayudas médicas necesarias como anteojos o medicamentos que un cuidador debería proveer.
También puede haber indicios de abuso financiero. Estos pueden incluir:
Alquiler sin pagar.
Cambios repentinos a un testamento.
Cambios inusuales en la administración del dinero
Grandes transacciones financieras inexplicables.
Hipotecas a pesar de recursos financieros suficientes.
Permitir que alguien nuevo acceda a cuentas bancarias.
Si sospecha que alguien es víctima de abuso de personas de la tercera edad, ¡no lo ignore! Si usted o un ser querido se encuentra en una situación que pone en peligro su vida, llame al 911. Si sospecha que algo no está bien, pero nadie parece estar en peligro inmediato, comuníquese con:
Los Servicios de Protección para Adultos locales en www.napsa-now.org/help-in-your-area (solo disponible en inglés).
El Centro Nacional Contra el Abuso de Personas Mayores al 1-855-500-3537 (ELDR).
También puede encontrar recursos locales adicionales buscando en el Localizador de Cuidados de Personas Mayores para su comunidad en eldercare.acl.gov/Public/index.aspx (solo disponible en inglés). El teléfono de la Oficina del Procurador de Personas de Edad Avanzada en Puerto Rico es 787-721-6121.
Tómese un tiempo para llamar o visitar a un adulto mayor. Pregúntele si está bien y escuche lo que le diga. Preste atención a las señales de abuso o comportamiento inusual. Sobre todo, no tenga miedo de denunciar casos de sospecha de abuso. Por favor, comparta esta información con quienes la necesiten.
Aclare dudas sobre los beneficios y servicios de Seguro Social accediendo www.segurosocial.gov, llamando al 1-800-772-1213 o visitando su oficina local de Seguro Social, disponible según su código postal en www.ssa.gov/locator/ .
