Por: Jose Frontera Fernández
En días recientes hemos leído y escuchado noticias sobre la inquietud de utilizar terrenos fértiles para plantar placas solares. En una isla tan pequeña, aunque el fin sea deseable, es una pena que inutilicemos terrenos habiendo ya otros terrenos que pudiesen brindar dicho beneficio sin perjudicar terrenos fértiles o útiles para otros usos como pudiese ser agricultura o construcciones de hogares.
Imagina que podamos instalar una red de placas solares a través de toda la isla, que similar al “super tubo”, pueda repartir electricidad a redes por los pueblos que pase sin estropear terrenos útiles.
Hoy día, vemos algunas áreas de estacionamiento a las cuales le han puesto placas solares. Muy buen uso del espacio. Un ejemplo, el centro de Convenciones.
De forma similar, aunque el costo de instalación sea más caro que sobre el terreno, se pudiese utilizar el terreno cubierto por cemento a lo que llamamos autopistas. Ya hemos inutilizado el terreno para agricultura u otros usos, no requiere expropiación, no debe intervenir con los acuerdos con las APP de carreteras y tiene todos los metros cuadrados de terreno que podamos soñar necesitar para placas solares disponibles alrededor de toda la isla.
Piensa en esta gran pista de generación de energía con salidas alimentando a los diferentes pueblos en el camino
Por dar unos ejemplos:
De Mayagüez hasta Ponce sobre la #2 (excepto cuesta de Sabana Grande y La Corco).
De Ponce a Guayama sobre la 52. Tramo plano de Cayey sobre la 52.
De Caguas hasta Humacao sobre la 30.
De Carolina hasta Canóvanas sobre la #66. De Luquillo a Humacao sobre la 3 y la 53
De Mayagüez a Añasco sobre la #2, planicie de Aguada, desde la 110 de Aguadilla a Arecibo.
En Autopista 22: desde Arecibo hasta Rio Hondo
Baldorioty de Castro desde el Condado hasta Isla Verde.
Sobre la Martínez Nadal. La 100 en Cabo Rojo. La 116 de Lajas a Guánica.
La 5 en Bayamón.
En fin, millones de metros cuadrados, no aptos para agricultura ni para ninguna otra construcción que darían vida a una autopista de energía que facilitaría micro redes en el camino.
Construidas a la altura de un techo de una casa de dos pisos (20 pies), con mayas que faciliten el mantenimiento, eviten algo pueda caer en la carretera y disimulen los espacios de luz y sombra entre placas para no confundir a los conductores.
Confío esta sugerencia llegue a oídos que puedan hacer una diferencia.
