Frente al Centro Operacional del Municipio de Guaynabo, ubicado en la PR835 con 836 en el Barrio Hato Nuevo, existe un terrero conocido comúnmente como la antigua sede fraternidad Alpha Phi Signa, contiguo al Río Guaynabo, donde un ente privado está llevando a cabo un depósito de escombros para rellenar y luego aplicar asfalto molido para aplanar el terreno.
Dicha acción, que lleva cerca de un mes en ejecución, se está llevando a cabo sin los permisos requeridos, denunció en la mañana de hoy la Dra. Elba Beatriz Rivera Estrada, candidata popular a la Cámara de Representantes por el precinto cinco que cubre parte de San Juan, todo Guaynabo y Aguas Buenas.
“Es increíble que frente al Centro Operacional, donde se está llevando un movimiento de terreno, nadie verificó los permisos. Eso evidencia dos cosas: un desconocimiento o desprecio a los reglamentos vigentes y una falta de protección a los recursos naturales que son de todos, porque hay un cuerpo de agua contiguo”, señaló Rivera Estrada.
En la mañana de ayer, personal del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) acudió al lugar para paralizar la obra. Según las fuentes de la candidata popular, ayer mismo iniciaron la solicitud de permisos por parte de la compañía DEV Builders llevan un mes trabajando en ese terreno.
Según la reglamentación vigente, la División de Corteza Terrestre del DRNA es la entidad que evalúa solicitudes relacionadas con la extracción, remoción, excavación y dragado de los componentes de la corteza terrestre al amparo de la Ley Núm. 132 del 25 de junio de 1968 mejor conocida como la Ley de Arena, Grava y Piedra, según enmendada. En dicha división se evalúan y tramitan los permisos correspondientes a la corteza terrestre como las canteras, extracciones de arena, grava y piedra y remoción de capa vegetal.
Por su parte, el candidato a alcalde por el PPD, Ernesto Cabrera Fuentes, señaló que “entiempos donde la protección ambiental es una prioridad a nivel mundial, particularmente en Puerto Rico hemos visto varios casos de repercusión pública, algunos bajo investigación. La función de los que aspiramos a representar a la ciudadanía con los valores de la democracia, estamos llamados a proteger los bienes comunes, no importa las cantidades o los valores en dólares y centavos. Es una cuestión de principios”. Cabrera exhortó al alcalde Edward O’Neill a que se exprese. “Por alguna razón el alcalde permanece silente cada vez que se hace un reclamo público. No informa, no comunica, no explica las situaciones que ocurren en su municipio, que dicho sea de paso, no es su finca privada”.
