La comunidad de Lares se ve gravemente afectada por el cierre obligado del Centro Acción Social, ubicado en la histórica Escuela Virgilio Acevedo, a causa de intensos problemas de pestilencia. Es especialmente preocupante que este centro, vital en ofrecer apoyo y servicios a nuestros respetados adultos mayores, haya tenido que cerrar sus puertas, una situación que, alarmantemente, no parece conmover ni preocupar al actual alcalde, Fabián Arroyo.
Este centro de Acción Social ha sido un pilar de esperanza y un recurso indispensable para la comunidad, proporcionando una amplia gama de actividades y servicios esenciales diseñados para enriquecer la vida de nuestros ciudadanos más vulnerables. La interrupción forzada de estos servicios es una clara indicación de la falta de mantenimiento adecuado y atención a la infraestructura esencial por parte de la administración municipal, dejando a empleados y participantes sin el entorno seguro, digno y confiable que merecen.
“Tenemos una profunda inquietud y un compromiso inquebrantable ante este desafío. La indiferencia y la parálisis administrativa no pueden definir el futuro de nuestro municipio. Debemos actuar de manera urgente para remediar esta crisis y asegurar que nuestras instalaciones públicas y de apoyo social ofrezcan un ambiente acogedor, seguro y accesible para todos aquellos que dependen de ellas”, aseguró Abid Quiñones, candidato a la alcaldía de Lares.
El presidente del Partido Nuevo Progresista en Lares, Abid Quiñones, sostuvo que, “la persistencia de esta situación crítica bajo la administración del alcalde Arroyo evidencia una alarmante falta de responsabilidad y preocupación por la salud y el bienestar de los habitantes de Lares. En representación de la voz colectiva de nuestra comunidad, exigimos al alcalde Arroyo que aborde este asunto de manera inmediata y efectiva”
Asimismo, el lareño añadió que el problema no es de falta de fondos para atender el problema, “el alcalde cuenta con los recursos municipales necesarios, la inacción frente a esta grave situación es inexcusable. Es inadmisible pensar que las prioridades del alcalde estén influenciadas por relaciones personales en lugar de las necesidades reales y apremiantes de nuestra gente. Se deben tomar medidas directas y transparentes para resolver esta situación lamentable. La salud, seguridad y bienestar de nuestra comunidad deben ser la prioridad absoluta.
Quiñones urge al alcalde a adoptar un plan de acción que incluya una evaluación inmediata de la situación actual del centro, la búsqueda de soluciones duraderas, y el fomento de un diálogo abierto con los ciudadanos de Lares. “Esta estrategia no solo abordará los desafíos presentes, sino que también reflejará un liderazgo comprometido y dedicado al avance y bienestar de nuestra comunidad, asegurando un entorno más saludable y un futuro lleno de esperanza para todos”, puntualizó Quiñones.
