Como parte de sus esfuerzos para integrar las artes como herramienta de apoyo emocional, el Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP), a través de su Programa de Artes Escénicas, llevó el teatro musical infantil La ventana mágica de Felipito Chichifú al Hospital Pediátrico Universitario en San Juan. Esta iniciativa acercó el arte escénico a niños y niñas que, debido a su hospitalización, no pueden asistir a una sala de teatro.
“El arte tiene el poder de sanar, acompañar y transformar, especialmente en momentos de vulnerabilidad. Con esta iniciativa, reafirmamos nuestro compromiso de llevar la cultura donde más se necesita”, expresó la directora ejecutivo del ICP, Melissa Santana.
La producción, escrita por Isabel Ramos y realizada por la compañía Ágora Teatro, se presentó en formato de comparsa recorriendo las distintas unidades del hospital. Desde la estación principal de la Sala de Emergencia, donde comenzó la experiencia con una colorida apertura musical, el elenco llevó alegría a los pasillos y habitaciones, permitiendo que pacientes pediátricos y sus familiares disfrutaran de una experiencia teatral única y emotiva.
Por su parte, el director del Programa de Artes Escénicas del ICP, Ismanuel Rodríguez, añadió que “el año pasado impactamos casi el 15% de los estudiantes del Departamento de Educación llevando teatro a todos los rincones de la Isla. En esta ocasión, llevamos teatro a nuestros niños del Hospital Pediátrico Universitario logrando que el teatro y la cultura sean accesible para todos”.
La ventana mágica de Felipito Chichifú cuenta la historia de un niño inquieto y soñador que se siente incomprendido por su entorno. Regañado constantemente por no poder controlarse, Felipito solo encuentra consuelo en el arte, en especial al pintar ventanas. Una noche, tras una nueva reprimenda, se asoma a la suya y algo mágico sucede: sus dibujos cobran vida. A través de sus personajes, el público descubre que en las diferencias también pueden habitar las mayores fortalezas.
Este musical de rock incluye 10 canciones originales compuestas especialmente para esta obra, y combina humor, imaginación y valores en una puesta en escena diseñada para estimular la creatividad y el bienestar emocional de los niños.
Coordinada por el Programa de Artes Escénicas del Instituto, esta actividad forma parte de una misión más amplia para garantizar el acceso a experiencias culturales significativas en espacios no tradicionales. Esta iniciativa fue posible gracias al apoyo de National Endowment for the Arts (NEA).
El ICP continuará desarrollando proyectos con impacto social, promoviendo el bienestar y la inclusión a través del arte y la cultura.