Por Melany Mercado.
La velocista paralímpica Yaimillie Díaz, hizo historia al conquistar la medalla de oro para Puerto Rico en el Grand Prix de Paratletismo celebrado recientemente en Cali, Colombia. La utuadeña, quien compitió en los 100 metros, no solo celebró su victoria, sino que superó una lesión que arrastraba desde hacía más de un mes, demostrando una vez más su temple y dedicación al deporte.
“Competir en el Grand Prix fue algo emocionante y bonito, además de que éramos todos de países latinos. Competir y representar a Puerto Rico siempre es un orgullo”, expresó Yaimillie, quien revivió emociones intensas al regresar a la ciudad donde tuvo su primera competencia internacional. “Cruzar esa meta y llevar una medalla para mi país es emotivo porque fue donde comenzó todo”, agregó.
En esta competencia, la atleta logró un tiempo de 14.80 segundos, bajando la marca de clasificación requerida para el Mundial de Paratletismo en India, a celebrarse en septiembre. “Me pedían 15.10 y yo hice 14.80, que no es un tiempo que normalmente hago, ya que mi mejor tiempo es 13.56”, explicó, destacando la dificultad adicional que enfrentó por una lesión en el hamstring.
Díaz no solo corre por medallas; corre por inspiración. “Cada día que entreno lo hago para que otras personas con mi discapacidad u otra discapacidad me vean y digan ‘si ella lo está haciendo, yo lo puedo hacer’”, expresó con firmeza. “Siempre trato de llevar un buen mensaje, una buena historia y una buena representación para que la gente se motive”.
La atleta enfatizó que cada logro también representa un avance para el Comité Paralímpico de Puerto Rico. “Esta medalla, para mí y para el Comité Paralímpico, es un ejemplo de que cuando uno quiere y se propone algo, lo puede lograr. A pesar de mi lesión me lo propuse y lo logré. Cada medalla, logro y exposición que yo tengo, le ayuda al Comité a seguir creciendo. El movimiento paralímpico tiene mucho que ofrecer y merecemos esa visualización”.
Con la mirada fija en el futuro, Yaimillie ya se prepara para el Mundial en la India, que será su cuarta participación a nivel mundial. Su meta a largo plazo: clasificar a los Juegos Paralímpicos de Los Ángeles 2028 y luchar por una medalla.
La utuadeña envió un mensaje inspirador a los jóvenes que, como ella, sueñan con representar a Puerto Rico en competencias internacionales: “No se quiten a la primera. Uno se va a caer, se va a tropezar, pero si uno es persistente y si uno sueña con algo grande y lo quiere cumplir, uno lo va a lograr”. Más allá del oro, Puerto Rico celebra el compromiso y la pasión de una atleta que deja huella dentro y fuera de la pista.
