Por Angélica Soto Ríos.
El alcalde de Moca, Efraín “Franco” Barreto, denunció que, al asumir el cargo, encontró que la piscina municipal se encontraba en un “serio deterioro” y, en declaraciones a este medio, señaló que se debió a la “falta de mantenimiento de la pasada administración”.
Según detalló, se encontraron problemas como la silla de salvavidas de madera rota, postes caídos, el portón principal que da acceso a la instalación dañado, la puerta del área de almacenamiento en mal estado y cables eléctricos expuestos, entre otros. Lo único que permanecía en buenas condiciones era el agua de la piscina.
“Desde que asumí la administración municipal, el mal estado del área de la piscina fue una de las primeras situaciones que llegó a mi conocimiento. Lamentablemente, desconozco las razones por las que se permitió que el lugar se deteriorara. Revisamos el presupuesto para identificar si hubo alguna inversión por parte de la administración pasada para mejoras al lugar, pero las gestiones fueron infructuosas”, puntualizó Barreto.

Debido a estas condiciones, y tras una evaluación, se decidió cerrar la instalación el primero de julio como medida preventiva para evitar accidentes o posibles fatalidades, mientras se analiza su reconstrucción y rehabilitación.
Al llegar también encontraron vigente un contrato que permitía a una entidad utilizar el espacio; dicho contrato terminó el 30 de junio y la entidad fue notificada sobre las medidas de seguridad. Entre las acciones iniciales, se removió la silla rota y el poste caído, y de forma paulatina continúan identificando recursos para rehabilitar el lugar y eliminar todo aquello que represente peligro.
Ante esta situación, el mandatario municipal destacó que buscan soluciones que permitan maximizar el uso de la instalación mientras beneficien a la comunidad y al desarrollo económico y social del pueblo.
“Estamos en medio del proceso de análisis para la realización de dos proyectos: Uno a nivel municipal y otro con FEMA. Nuestro interés es construir más de un gazebo, con la finalidad de alquilar el espacio para la realización de actividades de forma simultánea. Además, tenemos previsto recibir propuestas para ofrecer clases gratuitas de natación, terapias y otras iniciativas en beneficio de la comunidad mocana. También evaluamos la posibilidad de implementar algún programa que permita el uso y disfrute de la ciudadanía en general en un horario específico diariamente”, expresó.

Hasta el momento no se ha establecido una fecha específica para la reapertura, ya que el proyecto bajo FEMA se encuentra en proceso de someter la subasta y, a la vez, en evaluación para determinar si las brigadas municipales podrán realizar trabajos o si será necesario contratar a una empresa privada.
“Garantizo que trabajamos arduamente para identificar los recursos que nos permitan llevar a cabo los planes descritos. Lamentablemente, la precaria situación fiscal heredada de parte de la administración pasada dificulta destinar recursos de manera inmediata para reconstruir y rehabilitar el espacio. Sin embargo, es nuestro interés desarrollar un proyecto nuevo, cómodo, práctico y que sirva para múltiples ofrecimientos. Esto es lo menos que se merecen los mocanos”, concluyó Barreto.



                                    