La representante del Distrito 19 de Mayagüez, Lilibeth Rosas Vargas, radicó una medida legislativa para denunciar la oposición y rechazo contundente de la Asamblea Legislativa ante la amenaza de reducción de servicios esenciales y cese, en algunos casos, de los programas Head Start y Early Head Start. Esto debido al intento de disminución y reducción de fondos federales por parte de la administración del presidente de los Estados Unidos, Donald J. Trump. De igual forma, la representante hizo un llamado al gobierno para que asuma su responsabilidad de actuar de manera decisiva y convincente en defensa de estos programas de servicio y justicia social.
“Expresamos nuestra oposición y rechazo contundente ante la amenaza de disminución de servicios o cierre de los programas Head Start y Early Head Start en la isla, en especial en el Distrito de Mayagüez. Esta situación pone en jaque y atenta contra el desarrollo integral de las familias y los niños así como los servicios que reciben con los cuales se benefician o podrían beneficiarse miles de familias”, denunció Rosas Vargas. “De igual forma hago un llamado a la gobernadora Jenniffer González para que actúe con responsabilidad en defensa de estos programas que tantos servicios brindan a las comunidades”.
Fue a través de la Resolución Concurrente de la Cámara 19 la cual denuncia la oposición de la Asamblea Legislativa a la intención de la administración del presidente Trump. De la medida se desprende que los recortes propuestos obligarían a disminuir la matrícula de los programas en un 12% y un 15% a nivel nacional. Mientras, ante el escenario descrito, el Departamento de Salud y Servicios Humanos despidió aproximadamente 10,000 empleados incluidos cientos que supervisan los Head Start y la Subvención Global para el Cuidado y Desarrollo Infantil.
“De concretarse los recortes presupuestarios y de servicios implicaría la pérdida de trabajos para miles de empleados que son parte de estos programas federales en la isla. Esto me preocupa grandemente ya que la pérdida de empleos directos e indirectos aumentaría los niveles de pobreza en las familias de la isla lo cual sería nefasto y tendría un impacto multiplicador que conllevaría al estancamiento del desarrollo económico y social del país”.
“Es un atropello al cuidado y la educación del país el retirar el apoyo financiero a estos programas que brindan servicios en la isla desde 1965 y que atiende la población de cero a cuatro años y medio de edad así como a madres embarazadas, todos de familias de escasos recursos. Por esto me opongo a que se erradique un recurso invaluable que demostró y demuestra ser efectivo para apoyar a comunidades desventajadas”, sostuvo Rosas Vargas, quien reiteró su llamado a la gobernadora para que presente su plan de acción ante la posibilidad en la reducción de servicios o cierre de los programas.
Se estima que en Puerto Rico Head Start es el programa de cuidado y educación infantil temprana más completo. En 2024 brindó servicios educativos y de bienestar a aproximadamente 805,000 niños a través de todo Estados Unidos incluido Puerto Rico.