A raíz del informe publicado por la Junta de Supervisión Fiscal que concluye que Puerto Rico es tres veces más dependiente de fondos federales que los estados, el Lcdo. Salvador Rovira, profesor de derecho de salud, urgió al país a tomar medidas concretas y proactivas para fortalecer la sostenibilidad del sistema de salud local.
“La advertencia de la Junta ha despertado una serie de interrogantes legítimas y urgentes, particularmente en el ámbito de la salud y no puede ser tomada a la ligera. Gran parte del financiamiento del Plan Vital proviene del gobierno federal. Si esos fondos se reducen o cesan en octubre de 2027, como se proyecta, el país enfrenta la posibilidad de tener que aumentar su aportación al sistema de salud de $727 millones a más de $4,200 millones en los próximos años. A esto se suma la fragilidad de otros programas del Departamento de Salud, cuya operación también depende de fondos no recurrentes,” destacó Rovira.
El abogado señaló que la falta de una estrategia clara para reducir la dependencia de los fondos federales y la falta de transparencia en la planificación, no contribuyen a generar confianza.
Rovira insistió en que aún hay tiempo y capacidad para actuar, pero que el momento de planificar es ahora. Propone diversificar las fuentes de ingreso, establecer alianzas público-privadas, optimizar programas existentes y mejorar el uso de tecnologías de salud. También sugiere estudiar modelos exitosos ya identificados para encaminar un sistema más resiliente y sostenible.
“Puerto Rico cuenta con el talento, el conocimiento y los recursos técnicos y estructurales para enfrentar este reto. La clave está en transformar la preocupación en acción. Este momento exige algo más que respuestas reactivas: requiere planificación proactiva, coordinación interagencial y un compromiso real con la salud pública. Si bien las señales actuales plantean dudas, también hay margen para construir un camino más sólido y autosuficiente. Lo importante es que ese camino comience ahora,” concluyó.
