Yamilet Luciano Ruiz, profesora de lenguaje de señas.
En el marco del mes de la cultura sorda, Yamilet Luciano Ruiz, profesora de lenguaje de señas y miembro activo de la comunidad alzó su voz para hacer un llamado urgente a la sociedad y a las instituciones gubernamentales del país para mejorar la accesibilidad y promover la empatía hacia las personas con discapacidad auditiva.
“Actualmente, muchas de las agencias de gobierno no tienen intérpretes de lenguaje de señas, lo que limita nuestra interacción diaria con diferentes sectores y la capacidad de gestionar nuestras necesidades”, destacó Luciano Ruiz, quien trabaja en la Cámara de Representantes y se ha convertido en un puente esencial entre la comunidad sorda y las agencias gubernamentales.
Aunque reconoce pequeños avances desde la apertura de la oficina en el 2021, Luciano Ruiz señaló que aún hay sectores donde la accesibilidad es limitada o inexistente. “Todavía tengo personas que llegan a la oficina porque no fueron entendidas en otras agencias y eso es algo que debe cambiar”, agregó.
De acuerdo con Luciano Ruiz uno de los mayores retos que enfrenta la comunidad en la interacción con la Policía de Puerto Rico. «Hemos tenido casos donde los agentes no entienden y no buscan las ayudas necesarias, por lo que esas personas me han tenido que llamar para que sirva de intérprete «, destacó.
Entre otros aspectos, Luciano Ruiz denunció la falta de intérpretes en hospitales y oficinas médicas como otro problema crítico. «Muchos sordos deben ir acompañados de un familiar para traducir, pero esto viola su privacidad. Los planes médicos no siempre proveen intérpretes, solo Medicare lo hace», precisó.
Luciano Ruiz, quien es sorda profunda, ha logrado comunicarse eficazmente mediante la lectura de labios, una habilidad que ha desarrollado con el respaldo incondicional de su familia y asistencia continua a terapias del habla.
No obstante, subrayó la importancia de que la sociedad muestre empatía y paciencia. “Si no logras entender a una persona sorda por las dificultades que tiene al hablar, ofrécele ayuda. Muchas personas oyentes piensan que somos agresivos, pero en realidad es una expresión de la frustración que sentimos al no poder comunicarnos”, explicó.
De esta forma, la profesora hizo un llamado para que las instituciones comiencen a capacitar a su personal en lenguaje de señas. “Según la normativa, cada agencia gubernamental debería contar con al menos un empleado cualificado para asistir a la población sorda, la cual asciende a aproximadamente 250,000 personas en Puerto Rico”, expresó.
Luciano mencionó que septiembre, mes de la concientización sobre la cultura sorda, es una oportunidad para reflexionar sobre estas dificultades. “Es importante aumentar la visibilidad de la comunidad y fomentar la empatía, mejorar la accesibilidad y garantizar que las personas sordas tengan igualdad de oportunidades y servicios. He llevado años defendiendo a mi comunidad y nada ha pasado. Veo todo igual. Vamos a ver si cambia en algún momento», concluyó con esperanza.