Con la conclusión de las vistas evidenciarias del proceso de revisión tarifaria liderado por el Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR), y en las que la participaron LUMA, Genera PR y la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE), culminan semanas de análisis técnico, transparente y riguroso sobre el estado del sistema eléctrico y las inversiones necesarias para fortalecer la calidad, confiabilidad y resiliencia del servicio que reciben los clientes en Puerto Rico.
Reiteramos que, a solicitud del NEPR, presentamos dos planes de inversión, uno óptimo y otro limitado, para definir los niveles de financiamiento requeridos para fortalecer la confiabilidad y resiliencia del sistema, para así asegurar que cada centavo pagado por los clientes en la porción de transmisión y distribución de su factura se reinvierta directamente en la red eléctrica.
Durante las vistas se abordaron múltiples temas de impacto directo para los clientes y la operación del sistema, incluyendo la condición de la infraestructura de transmisión y distribución, la ejecución de trabajos operacionales, la respuesta a emergencias, la integración de nuevas tecnologías y el uso eficiente de fondos federales, todos los elementos clave para mejorar la estabilidad del servicio.
“Este proceso de revisión tarifaria es esencial para evaluar, con transparencia y base técnica, qué inversiones son necesarias para atender deficiencias históricas del sistema y proteger el servicio a los clientes a largo plazo”, expresó Alejandro Figueroa, principal oficial de Asuntos Regulatorios de LUMA. “Nuestro enfoque ha sido explicar con claridad cómo se identifican y priorizan estas inversiones y cómo se utilizan los recursos disponibles de manera responsable, siempre bajo la supervisión del Negociado de Energía.”
En este análisis, se priorizó el estudio de las operaciones del sistema, la maximización de los fondos federales y las iniciativas para mejorar la confiabilidad del servicio, con el objetivo de reducir las interrupciones, fortalecer la respuesta ante eventos y aumentar la resiliencia de la red eléctrica.
En el ámbito operacional, se evaluó la condición de equipos críticos que han superado su vida útil tras décadas de mantenimiento aplazado, así como los criterios para priorizar trabajos y equilibrar el mantenimiento preventivo y correctivo, procurando minimizar los impactos en el servicio que reciben los clientes.
Asimismo, se discutieron iniciativas clave orientadas a mejorar la confiabilidad del sistema, incluyendo el manejo de la vegetación, la modernización de subestaciones, la automatización de la red, la evaluación y el reemplazo de contadores inteligentes, así como mejoras en el alumbrado público, todas dirigidas a ofrecer un servicio más estable y consistente a las comunidades.
Otro componente relevante fue el uso de fondos federales, en particular los relacionados con la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés). Durante las vistas se explicó la complejidad de los procesos de elegibilidad, revisión y reembolso, así como la necesidad, en determinados casos, de utilizar fondos no federales para atender trabajos urgentes que no pueden esperar las resoluciones finales sin comprometer la estabilidad del sistema. Se reiteró que FEMA es la entidad que determina la elegibilidad final de los proyectos y que se mantienen esfuerzos continuos para maximizar cada dólar federal disponible y reducir las presiones futuras sobre las tarifas.
Durante el proceso, LUMA reiteró que opera bajo un modelo estrictamente regulado y fiscalizado y que no se beneficia económicamente de los ajustes tarifarios, ya que su compensación es fija conforme al Acuerdo de Operación y Mantenimiento (OMA). Cada dólar que se apruebe para transmisión y distribución se reinvierte directamente en operar, mantener y modernizar la red eléctrica que sirve a cerca de 1.5 millones de clientes en Puerto Rico.
Con la conclusión de las vistas, el NEPR evaluará el récord completo del caso y se espera que emita su determinación durante el primer trimestre de 2026, la cual definirá el marco de inversión y financiamiento que guiará las mejoras al sistema eléctrico en el corto y mediano plazo.
Juan Saca, presidente y principal oficial ejecutivo de LUMA, enfatizó que los clientes de LUMA están en el centro de cada decisión que toma la compañía dedicada a la operación y mantenimiento del sistema eléctrico. “Seguiremos ejecutando cada inversión aprobada con responsabilidad y transparencia, enfocados en el progreso continuo y con un solo objetivo: ofrecer un servicio eléctrico más confiable, resiliente y preparado para el futuro energético de Puerto Rico.”
“Dentro de la estructura tarifaria vigente, cerca del 80% del costo de la factura corresponde a componentes del sistema que no están bajo la operación de LUMA, como el combustible, los subsidios y otros gastos. Este dato reafirma la importancia de continuar comunicando con claridad cómo se distribuyen los costos y cómo cada inversión busca maximizar el valor para los clientes”, añadió el ejecutivo.
LUMA continuará colaborando de manera estrecha con el NEPR y las demás entidades del sistema eléctrico, reafirmando su compromiso de servir mejor a los clientes y avanzar de manera responsable en la transformación del sistema eléctrico de Puerto Rico.
