La obra Una noche mística: nos nace el salvador culminó con gran éxito sus dos presentaciones realizadas el sábado y domingo en el Centro de Bellas Artes Águedo Mojica Marrero de Humacao, ofreciendo al público una experiencia artística profundamente emotiva, espiritual e inmersiva.
El evento dio inicio con la presentación del grupo de Danzores de la Parroquia Santos Ángeles Custodios, quienes, a través del movimiento y la expresión corporal, prepararon el ambiente espiritual de la velada, marcando desde el comienzo el carácter solemne y reflexivo de la puesta en escena.
Previo a una de las escenas más significativas de la obra —el momento del pesebre que da paso al nacimiento de Jesús— se ofreció una reflexión a cargo de Kenia Gómez, la cual invitó al recogimiento, la introspección y la conexión espiritual, preparando al público para vivir con mayor profundidad uno de los instantes más conmovedores de la producción.
Uno de los aspectos más sobresalientes de la obra fue, sin duda, la impecable actuación de todo el elenco, que logró transmitir con fuerza, sensibilidad y autenticidad cada momento del relato. Cada intérprete aportó una presencia escénica sólida y comprometida, logrando una narrativa fluida y conmovedora que mantuvo al público completamente conectado de principio a fin.
Entre las interpretaciones más destacadas se encuentran Linda Marie Velázquez, quien encarnó a María con una entrega profundamente humana y espiritual; Wilberto Santana como José, aportando serenidad y fortaleza al personaje; Linnette Rivera como Isabel, con una actuación llena de calidez y emotividad; y Javier Martínez como el Ángel Gabriel, cuya presencia escénica dotó al personaje de solemnidad y fuerza divina. Cabe destacar que su interpretación también incluyó momentos jocosos, logrando una conexión especial con el público, particularmente con los niños presentes, quienes respondieron con sonrisas y atención constante. Asimismo, José Luis Burgos, Héctor Devarie y Mario Martínez ofrecieron una interpretación magistral como los Reyes Magos, aportando dinamismo, simbolismo y profundidad al desarrollo de la historia, junto a otros importantes integrantes del elenco que elevaron la calidad artística de la puesta en escena.
De manera especial, la voz de Dios fue representada por Jometh Rodríguez y Orlando Maldonado, cuyas intervenciones aportaron profundidad, solemnidad y un carácter trascendental a la narrativa, convirtiéndose en un elemento clave para la carga emocional y espiritual de la obra.
Cada cambio de escena integró interpretaciones musicales de los participantes, haciendo al público partícipe activo de cada canción y reforzando el carácter inmersivo de la experiencia teatral. La dirección musical estuvo a cargo de Adalberto Rodríguez, cuyo trabajo aportó coherencia, emotividad y una atmósfera sonora que acompañó de manera magistral el desarrollo de la obra.
Otro elemento que capturó la atención del público fueron los efectos especiales de sonido y visuales, cuidadosamente diseñados para crear una experiencia completamente inmersiva. Estos recursos permitieron que cada escena se viviera intensamente, despertando emociones genuinas y haciendo que el público se sintiera parte activa de la historia representada.
Durante la función del domingo, se aprovechó la ocasión para realizar reconocimientos especiales otorgados por el Municipio Autónomo de Humacao y su alcaldesa, Rosamar Trujillo Plumey, a tres humacaeños destacados por su trayectoria y aportación profesional: Maggie Serrano, reconocida líder comunitaria por su labor y compromiso con el desarrollo social de Humacao; Josean Rodríguez, joven músico virtuoso que se ha destacado por su talento y proyección artística; y Moraima Rowey, productora y directora de la obra, homenajeada por su sólida trayectoria profesional y su aportación al quehacer artístico y cultural del país.
El cierre de la obra estuvo a cargo de la cantante Giuliana B. Negrón Díaz, cuya interpretación del tema Santa la Noche se convirtió en uno de los momentos más conmovedores de la velada, logrando una conexión íntima con el público y dejando una sensación de recogimiento, esperanza y espiritualidad que marcó el final de la experiencia teatral.
La producción contó además con la presencia de importantes líderes religiosos, entre ellos el padre Floyd Mercado Vidró, de la Parroquia La Sagrada Familia de Palmas del Mar, iglesia de apoyo a esta obra, así como el padre Jonathan Pabón Tirado, de la Parroquia Nuestra Señora del Rosario en Naguabo.
Cabe destacar que entre los invitados especiales presentes en el público se encontró Sean Swarner, conferenciante motivacional de reconocimiento internacional, autor y sobreviviente de cáncer en etapa terminal, conocido mundialmente por haber conquistado el Monte Everest y las Siete Cumbres después de haber sido desahuciado médicamente. Su presencia aportó un valor significativo a la función, resaltando el alcance y la relevancia de esta producción más allá del ámbito local.
Al culminar el evento, Moraima Rowey, productora y directora de la obra, expresó: “Me siento sumamente feliz y satisfecha por el trabajo presentado. Fueron meses arduos de ensayos y preparación para presentar este gran proyecto de alto nivel en nuestro pueblo de Humacao. Así lo soñamos, y así lo vivimos emocionados todo el equipo de trabajo, sintiendo además la presencia de Dios en todo momento.”
Una noche mística: nos nace el salvador reafirma así su éxito como una propuesta teatral de alto nivel artístico, que une actuaciones memorables, excelencia técnica y un profundo mensaje espiritual, consolidándose como una experiencia inolvidable para el público puertorriqueño.





