Dr. William Ramírez Cacho
La reducción de la natalidad y el descenso en el número de partos en Puerto Rico mantienen en alerta a las comunidades del oeste, ya que al cerrar varias salas de parto alrededor de la isla se han puesto en riesgo los servicios de maternidad.
«En Puerto Rico se han cerrado más de una docena de salas de parto a través del tiempo. La razón principal para el cierre tiene que ver con la natalidad; ya que hemos tenido una baja significativa de nacimientos y eso hace que ya no haya tantos partos para poder atender», explicó el presidente de la Asociación de Hospitales, Jaime Plá Cortés.
De acuerdo con Plá Cortés se hace muy difícil para las instituciones de salud el poder mantener abiertas salas de parto si no tienen partos suficientes para que económicamente puedan mantenerse.
No obstante, según el doctor William Ramírez Cacho, director del Maternal Infant Center del Mayagüez Medical Center, la situación es más compleja y obedece a múltiples factores, entre ellos la escasez de anestesiólogos y la reorganización del sistema de salud.
«El problema no es únicamente la baja en la tasa de natalidad. Muchos hospitales están cerrando sus salas de parto no porque no haya embarazos, sino porque carecen de servicios auxiliares esenciales como anestesiología y unidades neonatales», explicó.
De acuerdo con el jefe de Ginecología del Grupo Hospitalario, uno de los problemas más graves es la escasez de anestesiólogos en la isla, lo que dificulta mantener abiertas las salas de parto. «En Puerto Rico hay una escasez de anestesiólogos y, sobre todo, de aquellos que estén disponibles dentro de la institución para atender emergencias obstétricas las 24 horas del día», señaló.
Actualmente, los hospitales en Mayagüez y Manatí son las únicas opciones disponibles para las mujeres embarazadas en el área oeste, lo que implica largos desplazamientos para muchas familias y deja una amplia zona sin servicios obstétricos adecuados, especialmente en municipios como Aguadilla. «Esto es una crisis que estamos empezando a enfrentar. Si la tasa de natalidad aumentara por alguna razón, nuestros recursos se verían sobresaturados», advirtió Ramírez Cacho.
En cuanto a la posibilidad de reabrir nuevas salas de parto, Plá Cortés manifestó que: «Esta es una función que es del Departamento de Salud, específicamente de la Oficina de Certificación y Licenciamiento de Facilidades, pero yo he dicho en algunas ocasiones que pudiera llegar el momento en que el gobierno va a tener que pensar si puede subsidiar alguna sala de parto para que se mantengan abiertas.»
Como parte de la situación, el doctor Ramírez Cacho subrayó la importancia de reorganizar el sistema de salud y de ofrecer recursos adecuados para garantizar la seguridad de las madres y los bebés. «No podemos sentarnos a hablar dos o tres personas y usar solamente el componente político o monetario. Hay que integrar todos los factores, desde los recursos humanos hasta la disponibilidad de especialistas que conozcan del tema», afirmó.
Ante esta situación, Ramírez Cacho hizo un llamado al Departamento de Salud para que asuma un rol protagónico en la planificación y refuerzo de los centros con los recursos apropiados. «El Departamento de Salud debe tener una estrategia para los próximos años, identificar centros con los recursos necesarios y equiparlos adecuadamente para que no se debiliten», instó.
Por su parte, el presidente de la Asociación de Hospitales recomendó trabajar para reinstaurar, a través de las escuelas, una educación que valore la importancia de tener una familia. Enfatizó que, en esencia, si no se valora tener familia, no habrá descendencia.
«Si no fomentamos este tema, seguiremos disminuyendo y esto es un problema mundial; en China hicieron un esfuerzo para limitar a la población a un solo hijo y ahora están en reversa, intentando que las familias tengan más hijos. Lo mismo sucede en Japón, donde hay una disminución significativa de la población por la falta de nacimientos», dijo Plá Cortés.
Para concluir, Ramírez Cacho expresó su preocupación por el aumento de partos en el hogar en el área oeste, posiblemente debido a la falta de acceso a salas de parto. «El área oeste es donde más se están concentrando las personas que fomentan, de una manera no muy responsable, los partos en la casa. No es que esté en contra de los partos en el hogar, pero el hospital es el lugar más seguro para hacerlo», comentó.
En cuanto al escenario en el Mayagüez Medical Center, el especialista destacó que la institución invirtió en modernizar sus instalaciones y reforzaron sus servicios, convirtiéndose en el hospital con más nacimientos en el área oeste. «De ser un hospital que no tenía servicio de obstetricia y ginecología, ahora somos el centro que más partos realiza en la región. Hemos reclutado ginecólogos nuevos que se han unido a nuestra facultad y hemos creado una sala de partos moderna, con todos los recursos necesarios», afirmó.
Como parte de la investigación, Periódico Visión realizó gestiones con el Hospital de La Concepción para obtener una reacción sobre el tema y a pesar de haber solicitado tiempo adicional para realizar la entrevista, estos a través de su portavoz de prensa, manifestaron que no se encontraban disponibles. Asimismo, se realizaron gestiones para obtener una reacción por parte del Secretario de Salud, pero tampoco fue posible.