El representante del Distrito 17 (Aguadilla y Moca) y portavoz alterno del Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Cámara de Representantes, Wilson Román López, denunció -hoy- la nefasta determinación de la empresa LUMA Energy de cesantear a 160 empleados en momentos en que persisten las quejas por un servicio eléctrico deficiente en toda la Isla.
A este reclamo se unieron el representante del Distrito 14 (Arecibo y Hatillo) y presidente de la Comisión de Asuntos al Consumidor, Edgar Robles Rivera, junto al representante del Distrito 13 (Arecibo, Florida, Barceloneta y Manatí) y presidente de la Comisión de la Región Norte, Jerry Nieves Rosario.
El portavoz alterno Wilson Román López expresó que “LUMA ha fallado en lo más básico: cumplir con su deber de ofrecer un servicio confiable al pueblo de Puerto Rico. Este despido masivo no solo pone en riesgo la estabilidad de cientos de familias trabajadoras, sino que demuestra el desorden y la falta de planificación con la que esta empresa maneja un servicio esencial. No se puede hablar de progreso cuando hay oscuridad en nuestras calles, postes llenos de vegetación y comunidades enteras sin luminarias. El pueblo está pagando por un servicio que no recibe y eso es inaceptable… “Los ejecutivos de LUMA Energy no tienen vergüenza alguna, no se bajan sus sueldazos, ni renuncian a sus lujosas vidas personales, pero sí se atreven a despedir a 160 empleados”.
Por su parte, el presidente de la Comisión de Asuntos al Consumidor, Edgar Robles Rivera, indicó que “cada trabajador despedido representa menos manos disponibles para atender las averías, y eso significa más retrasos, más apagones y más frustración para el consumidor. Desde la Comisión vamos a seguir fiscalizando este tipo de actuaciones, porque no se trata de una empresa privada más: se trata de quien tiene en sus manos la energía de todo un país. LUMA está incumpliendo con su contrato y el pueblo merece respuestas claras, no justificaciones”.
El representante Jerry Nieves Rosario destacó que “la Región Norte y el resto de la Isla viven, día a día, las consecuencias de un sistema eléctrico deficiente. No hay excusa para la falta de mantenimiento, la oscuridad en las vías públicas y el abandono en el manejo de la vegetación. Los trabajadores de LUMA son los que enfrentan el calor, la lluvia y el peligro para mantener la red en pie, y ahora son los primeros en ser sacrificados. Esto no es justo ni para ellos ni para los ciudadanos”.
Los tres representantes coincidieron en que las decisiones recientes de LUMA Energy reflejan una profunda desconexión con la realidad que vive el pueblo.
“Mientras Puerto Rico espera un sistema más confiable y seguro, lo que se recibe son apagones prolongados, alumbrados públicos sin servicio y comunidades que permanecen en la oscuridad física y emocional. Defender al trabajador y al consumidor es defender a Puerto Rico y en ese esfuerzo coincidimos sin reservas. LUMA tiene una responsabilidad contractual y moral con cada abonado y ha llegado el momento de que rinda cuentas y responda con acciones concretas, no con comunicados llenos de excusas”, concluyeron.
