El Departamento de Agricultura de Puerto Rico, liderado por el secretario Josué E. Rivera, anunció una nueva etapa del proyecto “Alimentemos a la Familia con Panapén”, con un enfoque transformador que prioriza la producción agrícola y la visibilidad del impacto real de los recursos entregados. Esta iniciativa, desarrollada con el respaldo del programa de Subvención para Cultivos Especializados del Departamento de Agricultura Federal (USDA), tiene como objetivo central fortalecer el cultivo de pana como herramienta de seguridad alimentaria y desarrollo económico.
A diferencia de iniciativas anteriores, donde los árboles eran distribuidos a la población general sin mecanismos de seguimiento y controles, en esta nueva fase se entregarán árboles de pana a un grupo seleccionado de 33 agricultores bona fide de toda la Isla. Esta entrega estratégica permitirá dar seguimiento técnico, medir la producción y acompañar a los agricultores en el proceso de siembra y manejo.
“Este no es un esfuerzo simbólico. Estamos asegurando que cada árbol entregado esté sembrado, cuidado y produciendo. Nos mueve el compromiso de transformar iniciativas en resultados tangibles”, expresó Josué E. Rivera, secretario de Agricultura.
En la actividad de entrega celebrada el jueves, 5 de junio de 2025 en la finca Amasar LLC en Jayuya, los agricultores participantes recibieron árboles de alta calidad, propagados mediante técnicas de injerto y cultivo de tejido. El nuevo enfoque contempla también un componente agroforestal, ya que parte de los árboles se utilizarán para proveer sombra a pequeños rumiantes, cultivos de café, cacao y otros, maximizando así su valor en sistemas diversificados de producción.
La Dra. Ruth L. Pagán Alvarado, directora ejecutiva del Fondo de Innovación para el Desarrollo Agrícola (FIDA, entidad adscrita al DA), explicó que “esta nueva etapa permite que el proyecto tenga un alcance directo en la producción agrícola de Puerto Rico. Estamos entregando árboles con potencial real de transformar la finca y generar alimento. Lo acompañamos con talleres de capacitación y asesoría técnica para asegurar el éxito de la siembra y el manejo a largo plazo”.
A los agricultores se les ofreció orientación sobre técnicas de siembra, poda, propagación y posibles usos comerciales de la pana, a través de talleres dirigidos por el profesor Zamora y la especialista Karla Morales del USDA-Rural. Además, los agricultores participantes podrán beneficiarse de incentivos regionales como el Programa de Maquinaria, incentivos para equipos especializados y vales de abono, herramientas clave para el establecimiento y desarrollo de este cultivo.
“El panapén no solo representa tradición y cultura, también es resiliencia. Tiene un alto valor nutricional, requiere bajo mantenimiento y es capaz de alimentar a una familia entera con el fruto de un solo árbol. Esta iniciativa reafirma nuestro compromiso con una agricultura productiva y sostenible”, destacó el secretario.
Según datos del Colegio de Ciencias Agrícolas de la Universidad de Puerto Rico, a partir del tercer año de siembra, el cultivo de pana comienza a generar producción significativa, alcanzando rendimientos que se estabilizan entre 180,000 y 216,000 frutas por 40 cuerdas anuales desde el séptimo año en adelante.
La actividad incluyó además un recorrido por las instalaciones de Amasar LLC, empresa puertorriqueña modelo en innovación agroindustrial, y una experiencia gastronómica para resaltar la versatilidad culinaria del panapén.
