Ante el alarmante aumento de casos de cáncer y Alzheimer en Puerto Rico, el licenciado Charlie Flores, CNMT, ha asumido la presidencia de la Sociedad de Medicina Nuclear e Imagen Molecular de Puerto Rico (SMNIMPR) con un firme compromiso de posicionar a la isla como líder en el diagnóstico temprano y tratamiento de enfermedades complejas. Respaldado por más de treinta años de experiencia en la medicina nuclear y con una visión de transformar el manejo de estas condiciones en la isla, Flores se enfocará en impulsar la adopción de tecnologías avanzadas y accesibles para la detección temprana de enfermedades.
Cada año, el cáncer afecta a miles de puertorriqueños, con más de 16,000 nuevos diagnósticos y 5,000 muertes anuales. El Alzheimer, otra amenaza significativa, se cobra la vida de aproximadamente 2,300 personas al año. Frente a estas cifras, Flores subraya que el diagnóstico temprano es crucial y que la medicina nuclear puede marcar una diferencia significativa, tanto en la evolución de estas enfermedades como en los costos asociados a su tratamiento. “La detección en etapas iniciales no solo salva vidas, sino que reduce considerablemente los gastos a largo plazo y disminuye la carga en el sistema de salud y en las familias puertorriqueñas”, afirmó el nuevo presidente.
Una de las herramientas innovadoras que Flores quiere destacar es el uso de la medicina nuclear para detectar biomarcadores específicos, como las placas de beta-amiloide y proteínas tau, indicadores de Alzheimer. Con estos avances, es posible identificar la enfermedad mucho antes de que los síntomas se agraven, lo cual puede cambiar el pronóstico y permitir una intervención más oportuna. Según Flores, “con el respaldo de aseguradoras y el acceso adecuado a estos diagnósticos, Puerto Rico puede enfrentar el Alzheimer y el cáncer de una manera mucho más efectiva”.
Además, Flores tiene la intención de promover el uso de radiofármacos, especialmente aquellos que han demostrado resultados prometedores en el diagnóstico y tratamiento de cánceres como el de próstata y los tumores neuroendocrinos, que ahora pueden ser detectados en etapas tempranas gracias a esta tecnología. “Estamos viviendo un renacimiento en la medicina nuclear que abre puertas de esperanza para muchos pacientes que antes no tenían opciones eficaces”, comentó Flores.
Entre sus objetivos principales, Flores adelantó que planea diseñar un Plan de Trabajo que fomente la educación continua en medicina nuclear y que acerque a los pacientes y profesionales de salud a las oportunidades que brindan estas tecnologías. La SMNIMPR busca ampliar el conocimiento sobre los beneficios de la medicina de precisión, manteniendo una comunicación constante con la comunidad médica y la industria de salud en la isla. Esto incluye orientar a los pacientes sobre el acceso a procedimientos de alta precisión y trabajar de cerca con aseguradoras para facilitar su cobertura.
Flores, quien estudió en la Universidad de Iowa y ha tenido una destacada trayectoria en el Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico, posee un profundo conocimiento tanto del contexto local como global de la medicina nuclear. Su experiencia abarca la educación clínica, el liderazgo en operaciones, ventas, mercadeo internacional y gestión de riesgos en el sector farmacéutico. Esta combinación de habilidades le permite traer una perspectiva innovadora y orientada a resultados a la presidencia de la SMNIMPR.
En la Asamblea Anual de la sociedad, Flores juramentó junto a una renovada Junta de Directores para el periodo 2024-2026. Este equipo incluye al Dr. Rafael Vaquer como vocal, al Lic. Ernesto Torres, CNMT, en la tesorería, al Lic. David Ramos, CNMT, como vocal, a la Dra. Sandra Gracia como secretaria y a la Lic. Yamaris Rivera, CNMT, en la vicepresidencia. Con esta nueva directiva, la SMNIMPR se prepara para enfrentar los retos del futuro y consolidar su rol en la transformación del diagnóstico y tratamiento de enfermedades en Puerto Rico.
La gestión de Flores marca el inicio de una etapa donde la medicina nuclear y las imágenes moleculares juegan un papel central en la detección precoz y el tratamiento efectivo de enfermedades complejas, con la promesa de mejorar la calidad de vida de los puertorriqueños y de establecer a la isla como referente regional en el uso de estas tecnologías.