
Los dueños de los paradores BOQUEMAR Y COMBATE BEACH RESORT junto a otros comerciantes en Cabo Rojo, hicieron un llamado urgente a todos los comercios turísticos a implantar estrategias que fortalezcan el cumplimiento de las medidas y protocolos de salud para contener la propagación del COVID-19, de forma que puedan reabrir rápidamente.
“Estamos claros que la velocidad con la que se implantó esta nueva medida preventiva va a causar un impacto severo en muchas empresas turísticas.
Sin embargo, los paradores somos familias puertorriqueñas sirviendo a otras familias del mundo, y nos preocupa más la calidad de nuestras facilidades y el bienestar de nuestros huéspedes, visitantes y empleados.”, indicó Tomás Ramírez, codueño del Combate Beach Resort.
Muchos empresarios de Cabo Rojo respaldan la orden ejecutiva municipal y se han movido nuevamente a la modalidad de ventas y servicio que había en la Fase 2 de reapertura. También indican la necesidad de más vigilancia y supervisión para asegurar el cumplimiento de las nuevas normas de convivencia comunitaria y las guías y recomendaciones del Departamento de Salud y la Compañía de Turismo.
Entre ellos, Eldin Mora, dueño del restaurante World Cup Kitchen Bar y creador de “Las 100 de la Parguera” se expresó en apoyo a medidas de supervisión más consistentes.
Durante los pasados meses, los paradores han hecho una inversión sustancial para implantar los nuevos estándares de salud, higiene y seguridad requeridos por la Compañía de Turismo. Además, llevan una campaña de educación al público en general sobre la importancia y la responsabilidad compartida de cumplir fielmente con las normas para mitigar la propagación del virus; y poder normalizar la actividad económica lo antes posible.
Estos comerciantes hacen un llamado a las agencias pertinentes para que asignen los recursos mínimos necesarios para la fiscalización efectiva, durante los fines de semana y las horas de más actividad económica. Entre estas incluyen a PROSHA, el Departamento de Salud, la Compañía de Turismo, el Departamento de Recursos Naturales, y efectivos de la Policía Estatal y Municipal de Puerto Rico. Consideran necesario que estas agencias intervengan con aquellos ciudadanos, alojamientos independientes y comercios que no cumplan con las normas y reglamentos establecidos a raíz del COVID-19.
Igualmente, convocan a todos los empresarios que componen la oferta turística en Cabo Rojo a que no permitan incumplimientos dentro y alrededor de sus negocios. “Necesitamos unirnos para evitar un segundo cierre total, lo cual sería mortal para todos nuestros negocios.”, indicó Tomás Ramírez.